El Gobierno anunció la eliminación de la retención del 95% del impuesto PAIS, un adelanto que ARCA (ex AFIP) exigía para acceder a divisas destinadas al pago de importaciones. La medida, que ya está en vigencia, abarata el tipo de cambio implícito para operaciones internacionales y se alinea con el fin del impuesto PAIS, programado para diciembre de 2024.
Desde octubre, la alícuota del impuesto PAIS para bienes y servicios importados volvió al 7,5%, tras haber sido unificada en un 17,5% durante los últimos años. Esta carga también aplica a consumos en dólares con tarjeta, como servicios o turismo, aunque no se prevé una compensación que lo sustituya.
El cese del pago anticipado tiene un efecto directo en las operaciones, ya que los plazos del Banco Central para habilitar divisas coinciden con la fecha límite del tributo, haciendo innecesario el adelanto. Según ARCA, la resolución general será publicada oficialmente esta semana.
Contexto e impacto del impuesto PAIS
El impuesto PAIS, establecido en las primeras semanas del mandato de Alberto Fernández, fue parte de un paquete de medidas económicas de emergencia. Durante su vigencia, la alícuota alcanzó picos históricos, buscando equilibrar las reservas del Banco Central en un contexto de crisis cambiaria.
Sin embargo, economistas advierten que el peso argentino continúa en una posición de apreciación relativa, según estudios recientes. Esto podría generar desafíos para la competitividad exportadora, mientras sectores como el turismo se preparan para aprovechar un tipo de cambio más favorable.
La eliminación del impuesto podría reducir las barreras para importaciones y gastos en el exterior, impactando tanto en las cuentas externas como en las dinámicas de consumo y comercio global.
Fuente: Infobae.